«Raíces del alma, estrías de guerra. Cicatrices que siempre me recordarán que aquí pasaste nueve meses. Con tu corazón latiendo al compás del mío, respirando de mis pulmones. Alimentándote de mi. ⁣

Siempre que las mire, recordaré como la vida me regaló la oportunidad de ser mamá, de crear vida a mi también. ⁣

Gracias por estas marcas, las llevare con orgullo… No es para menos, ya que siempre serán un recuerdo tuyo. ⁣

Nunca olvidare la sensación de tenerte aquí dentro, ni aunque pasen 100 años. ⁣

Serás la flor más bonita que crezca de estos árboles.⁣

Cada día que pasa es uno menos para conocernos. ⁣

Te quiero mi pequeña Lara. ❤️»⁣

¿Cuántas de vosotras habéis tenido miedo a perder vuestro cuerpo? ¿Cuántas habéis sentido tras el embarazo que no érais las mismas? ¿Cuántas os habéis acomplejado por vuestro físico? ⁣

Estoy segura de que muchas podríais levantar la mano con estas preguntas. ⁣

Engendrar un ser humano es el trabajo más complejo que realiza el cuerpo de la mujer. También el más bello, pues traemos vida al mundo. ⁣

Que bonita lección nos enseña Andrea. Luchamos contra las estrías del embarazo con todos los potingues que nos prometen no dejar huellas de que aquello pasó en mi cuerpo. Pero pasó. ⁣

Tu estrías son marcas de guerra, marcas de amor, raices del amor más fuerte y puro que nació de tí. Tu bebé se enraizó en tu vientre y podemos sentir esas marcas como un grato recuerdo. ⁣

GRACIAS ANDREA, POR DARNOS ESTA PRECIOSA VISIÓN DE ACEPTACIÓN DE NUESTRO CUERPO TRAS EL EMBARAZO.